Jornada de ideación colectiva para la reinserción laboral luego de adquirir una discapacidad

El Centro de Referencia e Innovación para la Inclusión Laboral denominado SUMA promovió el aporte de ideas y soluciones tecnológicas para facilitar la reinserción laboral de personas que adquirieron una discapacidad en su edad adulta, ya sea por un evento traumático, lesión por accidente o alguna condición de salud.

El centro, que funciona en conjunto entre la Secretaría de Discapacidad de la IM, la Unidad de Economía Social y Solidaria, Montevideo LAB y el PTIC, está compuesto por profesionales en Diseño Industrial, Ingeniería, Medicina Laboral, Psicología y Terapia Ocupacional que realizan un trabajo multidisciplinario para buscar soluciones a cada caso particular.

El viernes 8 y el sábado 9 de septiembre se realizó una jornada abierta a todas las personas y organizaciones que quisieran participar y aportar en la búsqueda de soluciones innovadoras de manera colaborativa.

La actividad comenzó el viernes 8 con la presentación de desafíos planteados en cuatro propuestas temáticas:

• Retorno al trabajo y señalética en la prevención de riesgos laborales en el rubro de la construcción ¿Cómo conseguir que la empresa no desvincule al trabajador o trabajadora por motivos de seguridad?
• Retorno al trabajo, ausencia prolongada y entornos de trabajo estresantes ¿Cómo se puede facilitar el retorno o la reconversión al trabajo luego de una ausencia prolongada?
• Retorno al trabajo, tecnologías emergentes y discapacidad visual ¿Cómo la utilización de la IA u otras tecnologías emergentes pueden derribar aquellas barreras existentes entre la experiencia, habilidades y vocación de la persona y la discapacidad visual?
• Retorno al trabajo y salud mental ¿Cómo abordar las barreras psicosociales que surgen en el retorno al trabajo tras un diagnóstico de trastorno mental grave y certificación prolongada?

El sábado 9 se trabajó en cuatro grupos, cada uno enfocado a una de las propuestas, la división de los grupos se realizó a través de la tarjeta identificadora, donde cada persona puso su nombre, en el dorso de la tarjeta se encontraban cuatro dibujos, cada uno de diferente color y con relieve para que pueda ser fácilmente identificado por personas con discapacidad visual.

Cada equipo realizó actividades de reconocimiento del desafío y trabajó durante toda la jornada para encontrar una posible solución. Para la creación de papelógrafos que contenían la consigna de cada etapa se tuvo disponible en todo momento diferentes materiales con diferentes texturas y colores para que su realización fuera lo más accesible posible. También se contó con intérpretes de lengua de señas uruguaya.

La jornada funcionó para poner a prueba el funcionamiento de SUMA y próximamente se van a abrir las inscripciones para que personas que adquirieron una discapacidad en su edad adulta puedan anotarse y así trabajar en conjunto en la búsqueda de soluciones para su reinserción laboral